El cuarto pasajero: Álex de la Iglesia mezcla comedia negra y caos

Resumen con spoilers de: El cuarto pasajero (2021) de Álex de la Iglesia

El cuarto pasajero es una película que combina elementos de comedia negra y caos absoluto, llevando a los personajes a un escenario lleno de situaciones extremas y absurdas. La historia comienza con Julián, un hombre divorciado y en paro, que intenta conquistar a Lorena, una joven que viaja en su coche, en un viaje que parece sencillo pero rápidamente se convierte en una pesadilla llena de giros inesperados. La película se desarrolla en un escenario de carretera donde la tensión, el humor negro y la violencia se entrelazan en un torbellino de eventos improbables.

Desde el inicio, la trama presenta a Julián como un personaje desesperado por cambiar su vida, mientras que Lorena parece más interesada en escapar de su realidad. Sin embargo, a medida que avanzan, la presencia de otros pasajeros, cada uno con sus propios secretos y personalidades, transforma el viaje en un caos total. La película se caracteriza por su tono irreverente y su estilo característico, que mezcla el thriller, la sátira social y la comedia negra en un cóctel explosivo que mantiene al espectador en tensión y risa a la vez.

La llegada de los pasajeros y el inicio del caos

Poco después de partir, Julián y Lorena se encuentran con Rodrigo, un artista excéntrico que graba todo con una cámara y apunta ideas en un cuaderno, aportando un toque de locura creativa a la situación. Mientras tanto, Sergio, un aventurero con un pasado oscuro y drogas en su equipaje, se une al grupo, generando una tensión palpable, especialmente con Lorena, quien mantiene una relación clandestina con él. La presencia de estos personajes aumenta la sensación de descontrol, y pronto, las discusiones y peleas comienzan a surgir en medio de la carretera.

Jules y Jim de François Truffaut: Amor, amistad y tragedia

A medida que avanzan, los incidentes se multiplican: un accidente menor se convierte en un caos mayor cuando Rodrigo intenta grabar todo y termina siendo atropellado por un coche que huye de la policía. La persecución policial se intensifica, y los personajes se ven atrapados en una serie de enfrentamientos que incluyen peleas, disparos y huidas desesperadas. La situación se vuelve cada vez más absurda, con escenas que mezclan humor negro y violencia, reflejando la fragilidad de sus relaciones y la locura que los envuelve. La tensión crece, y cada uno de los pasajeros revela secretos que complican aún más la situación.

Traiciones, secretos y el aumento de la violencia

Mientras la trama avanza, se revela que Sergio no es solo un aventurero, sino que también está involucrado en actividades ilegales relacionadas con las drogas, lo que provoca una traición inesperada. Lorena, que inicialmente parecía solo una víctima, resulta ser más astuta de lo que aparenta, y en un giro sorprendente, traiciona a Julián al revelar que en realidad ella también tiene secretos y motivos ocultos. La tensión alcanza su punto máximo cuando Rodrigo, en su obsesión por grabar todo, se convierte en una víctima de la violencia, siendo asesinado en un enfrentamiento con unos delincuentes que también estaban en la carretera.

Por otro lado, Julián, desesperado por salvar a Lorena y escapar del caos, termina enfrentándose a Sergio en una pelea brutal, donde ambos resultan heridos. La policía, que en un principio parecía solo una amenaza lejana, se acerca cada vez más, y los personajes deben improvisar para evitar ser capturados. La traición de Lorena se revela como un intento de escapar con una parte del dinero que Sergio había escondido, lo que genera un enfrentamiento final entre ambos. La película se vuelve cada vez más violenta y absurda, con escenas que combinan humor negro y tensión extrema en un escenario de total descontrol.

La lucha por la supervivencia y el clímax de caos

En medio de toda esa confusión, Julián intenta mantener el control y salvar a Lorena, pero la situación se desborda cuando Sergio, herido, decide vengarse y dispara contra Julián, quien cae gravemente herido. Mientras tanto, Lorena logra escapar con el dinero, dejando atrás a todos los demás en medio del caos. La persecución policial llega a su punto culminante cuando los personajes, en un intento desesperado por salvar sus vidas, se enfrentan en un tiroteo en una gasolinera, donde la violencia y el humor negro se mezclan en una escena de alta tensión y absurdo.

Finalmente, en un giro irónico, la policía logra capturar a los supervivientes, pero solo después de que todos hayan sufrido heridas graves y pérdidas irreparables. Julián, gravemente herido, se queda solo en el suelo, mientras Lorena desaparece con el dinero y Sergio muere en un tiroteo final. Rodrigo, que había sido atropellado, también muere, dejando un rastro de destrucción y secretos revelados. La película termina con una escena en la que los personajes, atrapados en un escenario de caos total, enfrentan las consecuencias de sus acciones, en un escenario que refleja la locura y la imprevisibilidad de sus vidas.

La locura que termina en caos total

El clímax de la película muestra a los personajes en un estado de total descontrol, con escenas de violencia, humor negro y traiciones que dejan claro que ninguno de ellos salió indemne. Julián, con heridas graves, se queda solo en un lugar desolado, mientras Lorena logra escapar con el botín y Sergio muere en un tiroteo final. La película cierra con una nota de desesperación y caos, dejando al espectador con la sensación de que en ese mundo, la mentira, la traición y la violencia son las únicas reglas que rigen la vida de estos personajes.

En definitiva, El cuarto pasajero es una historia que muestra cómo el caos puede desatarse en un escenario aparentemente simple, y cómo la violencia y la traición se convierten en las protagonistas en un relato que combina humor negro, tensión y absurdidad en cada escena. La película termina en un escenario donde la supervivencia parece una ilusión, y donde los personajes, atrapados en su propia locura, deben enfrentarse a las consecuencias de sus decisiones en un mundo que se ha vuelto completamente impredecible.