Sé infiel y no mires con quién: Comedia de enredos de Trueba

Resumen con spoilers de: Sé infiel y no mires con quién (1985) de Fernando Trueba

«Sé infiel y no mires con quién» es una comedia española dirigida por Fernando Trueba en 1985 que se desarrolla en un escenario lleno de malentendidos y situaciones cómicas relacionadas con las infidelidades y las relaciones amorosas. La película, con una duración de 88 minutos, presenta un entramado de personajes que se ven envueltos en enredos que terminan complicando aún más sus vidas, generando una serie de escenas divertidas y confusas. La historia se centra en las acciones y reacciones de estos personajes, cuyas vidas se cruzan en un torbellino de confusiones que reflejan las complicaciones de las relaciones humanas en la sociedad española de los años 80.

Desde el inicio, la película nos introduce en un mundo donde las apariencias y las sospechas dominan las relaciones, y donde cada personaje tiene secretos que, en un momento dado, salen a la luz de manera inesperada. La trama se desarrolla en un ritmo ágil, con diálogos ingeniosos y situaciones absurdas que mantienen al espectador en tensión, a la vez que provoca risas por la forma en que los personajes intentan resolver sus problemas amorosos y de fidelidad. La historia culmina en un caos controlado que deja en evidencia las hipocresías y las inseguridades de los personajes, en un escenario que satiriza las costumbres sociales de la época.

La trama de los enredos comienza con Fernando y su contrato

La historia arranca cuando Fernando, socio minoritario de una editorial en quiebra, intenta cerrar un contrato con la famosa escritora Adela Mora, quien está dispuesta a firmar un acuerdo para publicar su nuevo libro. Sin embargo, la situación se complica cuando Fernando, en su afán por cerrar el trato, se ve envuelto en una serie de malentendidos con su esposa Rosa, quien sospecha que Fernando le es infiel. Mientras tanto, Rosa también tiene sus propios problemas, ya que su amigo Óscar, con quien mantiene una relación, empieza a sospechar que ella le ha sido infiel, lo que genera una tensión adicional en el grupo. La relación entre estos personajes se enreda aún más cuando Rosa descubre que Fernando ha estado en contacto con Adela Mora, lo que alimenta las sospechas y los celos.

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Por otro lado, Carmen, la esposa de Paco, también se involucra en la trama al solicitar un piso para un encuentro con un joven en servicio militar, lo que provoca que Paco, su esposo, se vuelva paranoico y sospeche de ella. La confusión aumenta cuando Carmen, en su afán por mantener en secreto su encuentro, pide ayuda a Silvia, una amiga que envía taxis equivocados y genera errores en las entregas. Entonces, en medio de estos enredos, se producen cartas mal interpretadas, encuentros en hoteles y errores en los taxis enviados por Silvia, que hacen que todos los personajes crean que están siendo traicionados o engañados. La situación se vuelve cada vez más caótica, con personajes que se cruzan en lugares inesperados y que terminan en situaciones embarazosas y cómicas.

La confusión se intensifica con personajes y malentendidos

Mientras tanto, la confusión alcanza su punto máximo cuando una madame es confundida con Adela Mora, lo que provoca una serie de malentendidos en los que todos creen que están involucrados en un escándalo mayor. La policía también entra en escena cuando un incidente en un hotel lleva a que algunos personajes sean interrogados, aumentando la tensión y el caos en la trama. En medio de todo esto, Óscar descubre que Silvia, su amante, ha estado en contacto con otra persona, lo que provoca una crisis en su relación. La tensión crece cuando Carmen, al ver que Paco sospecha de ella, decide abandonar la casa y alejarse, dejando a Paco en un estado de confusión y tristeza. La película muestra cómo las fidelidades y las desconfianzas se convierten en el centro de los conflictos, mientras los personajes intentan resolver sus problemas sin éxito.

A medida que la trama avanza, se revela que Adela Mora, la escritora, en realidad no tiene nada que ver con los malentendidos, y que todo ha sido una serie de malas interpretaciones y errores de comunicación. La firma del contrato con Adela se realiza finalmente, pero no sin antes que los personajes hayan pasado por situaciones embarazosas y cómicas. La tensión entre Rosa y Fernando se resuelve cuando ella decide confrontarlo y aclarar las sospechas, lo que lleva a una reconciliación. Por otro lado, Silvia y Óscar deciden dejar atrás sus diferencias y retomar su relación, mientras que Carmen, tras su ausencia, regresa con una actitud diferente y dispuesta a solucionar los problemas con Paco. La película continúa con una serie de escenas en las que los personajes intentan normalizar sus vidas, aunque las confusiones todavía persisten.

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La resolución de los enredos y el cierre de las historias

En el momento en que parece que todo se ha calmado, la película da un giro cuando Fernando, en su búsqueda de una nueva vivienda, termina siendo sorprendido por Rosa en su despacho. Ella, en un acto de sinceridad, decide compartir un momento de amor y confianza con Fernando, dejando en evidencia que las malas interpretaciones y los malentendidos han sido solo obstáculos en su relación. Mientras tanto, Paco y Carmen, tras su separación temporal, deciden reconciliarse y retomar su matrimonio, entendiendo que las sospechas y los celos solo habían alimentado el conflicto. La historia termina con una escena en la que todos los personajes están reunidos en una especie de celebración, en la que se evidencia que, a pesar de los enredos, el amor y la amistad prevalecen, y que las confusiones solo sirven para poner a prueba la paciencia y la confianza de cada uno.

Por otro lado, la película deja en claro que las infidelidades y los secretos no siempre son lo que parecen, y que muchas veces, los malentendidos nacen de las malas interpretaciones y las inseguridades. La escena final muestra a Rosa y Fernando compartiendo un momento de complicidad, mientras que Silvia y Óscar deciden seguir juntos, y Carmen y Paco retoman su relación con una nueva perspectiva. La película cierra con una nota de humor y optimismo, dejando en evidencia que las enredos y las confusiones son parte de la vida, y que, en el fondo, lo importante es la honestidad y la confianza entre las personas. La historia termina en un tono alegre, con la sensación de que, a pesar de todo, las relaciones humanas siempre encuentran su camino para seguir adelante.